La mayoría de los estudiosos del tema coinciden en que, si bien en 1920 el invento de Guglielmo Marconi era ya en Estados Unidos y en Europa una herramienta usual de la radiotelefonía (comunicación interpersonal con fines privados o bélicos), le cabe a la Argentina el rol de pionera en la radiodifusión. El 27 de agosto de 1920 el médico Enrique Telémaco Susini, junto a otros tres estudiantes: Miguel Mujica, César J. Guerrico y Luis Romero Carranza formaron ese grupo de “locos de la azotea” que transmitió desde el Teatro Coliseo la ópera Parsifal, lo que más tarde sería oficializado como “primera emisión al público”.
Con nuevos conocimientos y elementos técnicos traídos de Europa, “los locos de la azotea” transmitieron con un equipo precario. El único micrófono que se pudo conseguir para tomar los ruidos del ambiente era uno para sordos, que fue ubicado en el paraíso del Teatro Coliseo. Un transmisor de 5 W instalado en la azotea del edificio, los alambres para bobinas, los transformadores, los condensadores, todo estuvo listo. Entre el teatro y la cúpula de la casa de Cerrito y Charcas fue colocada la antena. La transmisión fue realizada con éxito aunque todavía en aquella época escuchada por pocos. Desde ese momento los programas siguieron sin interrupciones. Al siguiente día se transmitió Aída, por la tarde nuevamente Parsifal y a la noche Iris. (Extractos del libro “Dias de Radio” de Carlos Ulanosvsky). Esta continuidad nos hace decir que en Argentina nació la Radio como medio de Comunicación.
Fuente: “ALGO HABRAN HECHO POR LA HISTORIA ARGENTINA» FELIPE PIGNA – MARIO PERGOLINI